Estamos de acuerdo en una limitación que tienen los paneles solares: solo producen electricidad cuando el sol brilla. Sin embargo, el uso máximo de energía tiende a ocurrir por la noche, coincidiendo con la disminución de la generación solar y provocando un problema de oferta y demanda. La cuestión es que los paneles solares a menudo bombean energía más que suficiente durante las horas de menor demanda cuando el sol brilla para satisfacer la demanda máxima más tarde en el día. Esto significa que el almacenamiento eficiente de energía solar puede abrir una gran cantidad de posibilidades tanto para los propietarios de viviendas como para las empresas.
En el artículo de hoy veremos porque es importante el almacenamiento de energía solar y sus beneficios.
¿Cómo se almacena la energía solar?
El almacenamiento de energía solar se puede dividir en tres categorías generales: batería, térmica y mecánica. Echemos un vistazo rápido a cada uno.
1. Almacenamiento de Batería
Las baterías son, la forma más común para almacenar la energía solar. Cuando se bombea energía solar a una batería, una reacción química entre los componentes de la batería almacena la energía. La reacción se invierte cuando la batería se descarga, lo que permite que la corriente salga de la batería. Las baterías de iones de litio se usan más comúnmente en aplicaciones solares, y la nueva tecnología de baterías se está expandiendo rápidamente, lo que promete producir soluciones de almacenamiento de baterías más económicas y escalables.
2. Almacenamiento Térmico
El almacenamiento de energía térmica utiliza varios medios, como agua o sal fundida, para absorber y retener el calor del sol. Este medio calentado se almacena en un tanque aislado hasta que se necesita la energía, generalmente para hervir agua para generar energía.
3. Almacenamiento Mecánico
El almacenamiento de energía mecánica aprovecha la energía potencial de un objeto para generar electricidad. Los métodos de almacenamiento mecánico convierten el excedente de energía eléctrica en energía mecánica, que se vuelve a convertir en electricidad para su uso posterior. Hay tres sistemas prominentes de almacenamiento de energía mecánica:
1. Volante: Este método utiliza el excedente de electricidad para hacer girar un volante, que luego genera electricidad para suministrar energía rápida durante los momentos de máxima demanda.
2. Hidroeléctrica bombeada: Con hidroeléctrica bombeada, el agua se bombea cuesta arriba a un depósito ubicado sobre los generadores de turbina. El agua puede fluir a través de turbinas y generar electricidad cuando la demanda es alta.
3. Aire comprimido: Con este sistema de almacenamiento de energía, el aire comprimido se bombea a recipientes grandes, como un tanque o una formación subterránea. El aire se libera para generar electricidad durante los picos de demanda.
¿Cuáles son los beneficios de almacenar energía solar?
El almacenamiento de este excedente de energía es esencial para aprovechar al máximo cualquier sistema de paneles solares y puede resultar en ahorros de costos, redes de energía más eficientes y menores emisiones de combustibles fósiles. El almacenamiento de energía solar tiene algunos beneficios principales:
1. Equilibrio de cargas eléctricas: Si la electricidad no se almacena, se tiene que utilizar en el momento en que se genera. El almacenamiento de energía permite almacenar el excedente de generación para el uso máximo. En cuanto a las energías renovables, almacenar los excedentes permite que las luces permanezcan encendidas cuando se pone el sol o deja de soplar el viento. En pocas palabras, el almacenamiento de energía permite que se cargue un depósito de energía cuando la generación es alta y la demanda es baja, y luego se libera cuando la generación disminuye y la demanda crece.
2. Reducción de la huella de carbono: Con un mayor control sobre la cantidad de energía solar que usa, el almacenamiento de baterías puede reducir la huella de carbono de su propiedad en áreas con energía de servicios públicos basada en combustibles fósiles. Las baterías solares grandes también se pueden usar para ayudar a cargar vehículos eléctricos y convertir cualquier electrodoméstico en su hogar en un dispositivo “alimentado por energía solar”.
3. Ahorro de facturas eléctricas: Si vive en un estado que no tiene medición de energía solar neta o políticas que no lo compensan de manera justa por la energía solar que genera, el almacenamiento en baterías puede ayudar a reducir sus facturas de servicios públicos mientras consume más de su propia energía. Por lo tanto, si bien es posible que no reciba tanta compensación por el exceso de energía enviado a la red, cualquier energía solar adicional generada y almacenada durante el día puede descargarse de una batería por la noche o en días nublados en el lugar de consumo de servicios públicos.
4. Rellenando los huecos: El almacenamiento de energía solar a corto plazo permite un flujo de energía constante durante interrupciones breves en los generadores, como nubes pasajeras o mantenimiento de rutina.
5. Resiliencia energética: La red de energía es vulnerable a interrupciones y apagones debido a cualquier cosa, desde incendios forestales hasta condiciones climáticas adversas. El almacenamiento de energía solar crea una burbuja protectora durante eventos disruptivos al descentralizar de dónde obtenemos nuestra energía.
Conclusión
El sol ofrece un suministro ilimitado de energía limpia, pero aprovecharlo puede ser un desafío. Afortunadamente, existen varias opciones de almacenamiento comercial y residencial, que ofrecen soluciones para almacenar energía solar.
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